Yo tenía diez o doce años cuando aprendí mecanografía, aquellas clases inmensas y heladas en que sólo se oía el ruido rítmico de las olivetti; a todo trapo unas, vacilantes y lentas las otras.
Recuerdo que era invierno y cuando iba de vuelta a casa caminando por las calles, llevaba las manos en los bolsillos de la chaqueta y me entretenía observando cada rincón, cada tienda, cada aparador y escaparate que me encontraba.
Todas las cosas que veía las etiquetaba mentalmente; y aquellas palabras que surgían iban repitiéndose en mi cabeza, mientras los dedos tecleaban entre la ropa, en el abrigo o apretados en unas manoplas de lana gruesa.Fue casi enfermizo, costumbre compulsiva y febril que seguí perpetuando por mucho tiempo, hasta el punto de dibujar palabras por medio de golpeteos en casi cualquier superficie. Incluso una vez lo hice en la espalda de Cata.
Fue una noche de Julio, en que tras el sexo cayó rendida sobre el colchón desnudo de mi cama. Mientras trataba de recobrarse, me declaré a ella a lo largo de su espalda, escribiendo con mis dedos todo lo que sentía al estar a su lado.
Sólo conseguí hacerle cosquillas con mi amor y mis deseos ciegos.A pesar de que nunca lo supo realmente, siempre llevará en su piel el rastro, la huella de mis frases dedicadas. Me gusta pensar que, de algún modo, todo eso la envuelve; reconfortándola cuando se sienta mal, como un talismán o un embrujo que no sabe que posee, pero que lleva consigo allá donde vaya.
Como en aquella canción brasileña, tatuagem se llamaba, permanecer de algún modo…
Más cosas que no sé donde colocar, o que sí, pero me gustan tanto tantísimo que no puedo aguantar sin exhibirlas.
PD: la canción está bien, la estética del vídeo ya… jejejje
m-a-r-a-v-i-l-l-o-s-o (¡clinck!).
estoy como un niño con zapatos nuevos, feliz feliz, lo leo y sonrío… ¿me estaré volviendo una ególatra?
😛
bicos
tiene fuerza.
ególatra? y quién no lo es en la blogosfera? 😀
bss admirados.
vale, ególatra a ratos, pero ahora estoy sonrojada…
bicos agradecidos
Oh, Oh, Oh!!
Sencillamente perfecto…
Te ponían pegatinas de colores en las teclas y un tablero gigante en la pared de enfrente? ASDFG HJKLÑ agggggg…
Besos, artista.
en realidad yo nunca he ido a mecanografía, no uso mis meñiques y desplazo la mano por el teclado, fue algo que me contaron y después mezclé con la canción y mis divagaciones…
bicos
Estoy con poedía, me encanta niña.
Ole tú, ole tus teclas.
🙂
maría- ole tú también… que en esto de los proyectos con teclas vamos casi de la mano, a la misma vez….
😉
Estás escribiendo algo? novela? algo?
ole!!
síi, son cachos de trozos de «algo», llevo un tiempecillo, entre planes y estrategias, pero ahora cojo carrerilla….
bicos
Oeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee!
cómo me alegro!
seguro que sea lo que sea, cuando sea, será la leche.
y que lo vean estos ojitos!
😀
me encanta, me encanta, me encanta, escribid todas…. yo os leere a todas!
Bicos!!!!!!!!!!!!!!
bien, entonces nos leeremos mutuamente todos, y gracias, que tanto piropo se me va a subir a la cabeza jejejejee
bicos repartidos
Oli, amiga, estamos hablando de Calamar y Desco, dos soberbias plumas, que se decía antes, dos soberbios teclados, que es más propio decir ahora…O no…Oiremos hablar de ellas y, por supuesto, las leeremos…
El caso es que yo sí que me apunté a mecanografía a los quince años. Una pasta el cursillo en aquellas «academias» de mecanografía en las que nuestros ingenuos padres apuntaban a sus retoños con el sueño de que algún día fueran «escribientes», o algo así…Yo me apunté porque la niña que me gustaba se había apuntado. Y entre «asdfgfs» y «ñlkjhjs», le podía introducir, con perdón, algún que otro «me gustas» en el teclado de su olivetti….Hasta fiesta de fín de curso hizo la academia de mecanografía…:Apartaron las olivettis y en la improvisada pista, tecleamos los primeros balbuceos de una bonita historia….
Debe ser por eso que me ha tocado especialmente este artículo de Desco. Debe ser por eso que a mí también me gusta aporrear el teclado con mis tontadas….
Bicos y besos.
en mi época te apuntaban a esa misma academia de mecanografía, que había cambiado las olivetti y sus timbres y cintas roji-negras por unos ordenadores en los que aprendíamos algo llamado ms-dos, aunque al final lo único que nos quedase claro era que no se podía apagar sin más el cacharro en cuestión…
y muchas muchas gracias, bicos múltiples
Srta. D. dondequiera que lo ponga queda bien, como siempre.
Coincido con Mamporrero, Miss Calamar y Srta. D son de lectura obligada…jejeje
Saludos
lectura obligada pero con gusto, espero jejejeje
bicos
Con mucho gusto, al menos en mi caso.
Veo que todos los lugares donde enseñaban mecanografía eran fríos, extraños,… con ese hilo musical en forma de clicks y timbres cuando se acababa el carril. Yo no lo aguanté muchos días. Me aburría eso de… qwert qwert…
Besos
mitchell- entonces, que sea por mucho tiempo….
solounpoco- las academias, fuesen de lo que fuesen, resultaban lugares extraños; cuartos pensados para ser dormitorios o salones que se llenaban de mesas, sillas, persianas subidas al máximo, pizarras y luces en forma de barra fluorescente parpadeante (siempre parpadeaba alguna)
bicos
Algún día espero que no muy lejano, cuando lea tu libro, podré decir, eis que yo la leía en sus comienzos
petonets
PLANETA NO LO SE PERO DAUNGUSTINI LEER TUS HISTORIAS… JEJEJE
alicia- ey….por ahora leernos mútuamente tampoco está mal, ¿no?
knivess- ey, yo gané un superconcurso con siete años, ¿para qué quiero un Planeta si ya me gané un Quijote ilustrado y una caja de pinturas?
;P
bicos
leernos mutuamente no está nada mal, está pero que muy bien, sobre todo para mi que disfruto con cada uno de tus post, ais!!! que bonito me ha quedao
petonets
si, preciosísimo… a seguir leyendo y escribiendo…
🙂
bicos